Asesinos de élite

Título original: Killer Elite. Año: 2011. País: Estados Unidos. Género: Acción, Intriga. Director: Gary McKendry. Guionistas: Gary McKendry y Matt Sherring (adaptando una novela de Ranulph Fiennes). Intérpretes: Jason Statham, Clive Owen, Robert De Niro, Dominic Purcell, Aden Young, Yvonne Strahovski, Adewale Akinnuoye-Agbaje, Grant Bowler, Michael Dorman, Ben Mendelsohn, Kristy Barnes-Cullen.     

Que Jason Statham (un actor cuyo carisma está muy por encima de las mediocres cintas de acción que suele protagonizar), Clive Owen (uno de mis intérpretes favoritos) y Robert De Niro (cuyo papel se reduce a poco más que un simple cameo) compartan cartel es ya motivo suficiente para interesarse por este trabajo.
 

Sin embargo, no sabía a qué atenerme. ¿Sería ésta otra de esas tonterías tipo Transporter o The Mechanic? ¿O tal vez una película de acción más adulta y seria? Pues bien, yo me esperaba lo segundo, sobre todo teniendo en cuenta que se basaba en hechos reales, pero lamentablemente me equivocaba. La historia tiene como protagonista a un ex–miembro de las fuerzas especiales (Jason Statham) que es contratado, junto a otras dos personas, para cometer tres asesinatos, encargo que acepta con la esperanza de salvar la vida de un amigo.

Puede que los amantes de la acción pura y dura disfruten (con reservas, de eso estoy seguro) de esta cinta (más aún si tenemos en cuenta su fantástico trío protagonista), pero los demás nos tendremos que conformar con un par de escenas realmente destacables, con un Clive Owen dando empaque a unos diálogos que no lo tienen y con un Robert De Niro que parece habérselo pasado bomba (nunca mejor dicho) durante el rodaje.

Lo mejor: Su trío protagonista.

Lo peor: Sus actores se merecen algo mejor.

Puntuación: 5/10.