miércoles, 4 de enero de 2017

María Antonieta

Título original: Marie-Antoinette. Año: 2006. País: Estados Unidos. Género: Drama. Director: Sofia Coppola. Guionista: Sofia Coppola (adaptando la novela de Antonia Fraser). Intérpretes: Kirsten Dunst, Jason Schwatrzman, Rose Byrne, Asia Argento, Judy Davis, Rip Torn, Marianne Faithfull, Molly Shannon, Steve Coogan, Jamie Dornan.

El cine histórico no me va mucho, pero Sofia Coppola es una de esas directoras cuyos trabajos veo sí o sí. El que nos ocupa no iba a ser una excepción. Además, me llamaba mucho la atención comprobar qué había hecho para molestar tanto a aquellos críticos que la despedazaron sin piedad cuando María Antonieta se exhibió en el Festival de Cannes.


Kirsten Dunst, quien ya había trabajado con Coppola en la maravillosa Las vírgenes suicidas (The Virgin Suicides), da vida a María Antonieta y Jason Schwartzman (primo de la directora) a su apocado esposo, es decir, a quien acabaría convertido prematuramente en rey de Francia. Asia Argento (hija del director de fanta-terror italiano Dario Argento) consiguió el papel de Madame Du Barry después de que éste fuese rechazado por Angelina Jolie (Catherine Zeta Jones fue otro de los nombres que sonaron para interpretarlo). El casting se completa con actores tan dispares como Molly Shannon (Saturday Night Live), Judy Davis (una de las actrices fetiche de Woody Allen), Steve Coogan (Philomena), la cantante Marianne Faithfull o el protagonista masculino de Cincuenta sombras de Grey (Fifty Shades of Grey), Jamie Dornan.


La fotografía, el vestuario y los decorados son, como suele suceder en este tipo de producciones, algunos de los puntos más destacables de la misma. A ello habría que sumar la muy acertada labor de Dunst o una banda sonora de auténtico lujo (por lo menos para los que nos gusta el rock alternativo). Comprendo que los más puristas la criticasen, pero a mí me parece una película arriesgada (y eso es algo que valoro muy positivamente) y con muchas virtudes (todas las expuestas unos párrafos más arriba).

Lo mejor: La dirección artística.

Lo peor: Que sea vista como una (simple) provocación de Coppola.

Puntuación: 6/10.

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