An Education

Título original: An Education. Año: 2009. País: Reino Unido. Género: Drama, Romance. Directora: Lone Scherfig. Guionista: Nick Hornby (adaptando el libro de Lynn Barber). Intérpretes: Carey Mulligan, Peter Sarsgaard, Alfred Molina, Rosamund Pike, Dominic Cooper , Olivia Wiliams, Cara Seymour, Emma Thompson, Sally Hawkins, Ellie Kendrick, Matthew Beard.

Jenny (Carey Mulligan, vista en Drive) es una joven estudiante con un estricto plan de estudios auspiciado por su progenitor (Alfred Molina); afortunadamente cuenta con la inestimable ayuda de su comprensiva madre (Cara Seymour). Su gran sueño es visitar París y vivir de manera cosmopolita, algo que parece hacerse realidad cuando conoce a David (Peter Sarsgaard, actor que ha participado en largometrajes como Boys Don’t Cry o Blue Jasmine), un treintañero que la sumergirá en un estilo de vida muy diferente al de su monótona rutina familiar y de estudios. 

Rodada con pulcro clasicismo, la película se sustenta gracias a un guión que, al igual que la dirección, denota un acertado gusto por el melodrama formal. También ayuda que cuente con una pareja protagonista (Mulligan y Sarsgaard, claro) que irradia encanto (véase cómo el muchacho se camela a los padre de Jenny); algo que no sucede con los secundarios, ya que no están tan bien definidos ni sus personajes despiertan el mismo cariño. Así, por ejemplo, tenemos a unos correctos Dominic Cooper y Rosamund Pike (dando vida a una entrañable snob de lo más tontorrona) o a unas desperdiciadas Emma Thompson y Olivia Williams, quienes interpretan a la directora y profesora, respectivamente, del colegio en el que cursa estudios nuestra protagonista.

El guión, basado en las memorias de Lynn Barber, posee el valor de la sencillez; el mismo que desprenden sus protagonistas (véase su primer encuentro o la escena del plátano). A todo ello habría que sumar un perfecta combinación de vestuario, fotografía (con predominio de los colores tierra) y banda sonora. Se puede acusar a su directora de no arriesgar demasiado, pero lo que realmente cuenta es que al final queda la sensación de haber visto una película alentadora, moralista (en el buen sentido) y vital. Una película de las que embelesan.

Lo mejor: El encanto de su historia y de su pareja protagonista.

Lo peor: El poco jugo que se saca a los personajes secundarios.

Puntuación: 7/10.