El árbol de la vida

Título original: The Three of Life. Año: 2011. País: Estados Unidos. Género: Drama. Director: Terrence Malick. Guionista: Terrence Malick. Intérpretes: Brad Pitt, Jessica Chastain, Hunter McCracken, Sean Penn, Laramie Eppler, Tye Sheridan, Fiona Shaw, Joanna  Going.

Malick es un director muy especial que me recuerda sobremanera al genial Stanley Kubrick. Y no lo digo sólo porque a veces tarde décadas entre película y película, sino por su casi enfermizo gusto por el detalle. Aunque ése no sería el único punto de unión entre ambos directores, ya que la película que nos ocupa, para bien o para mal (despertará tantas pasiones como animadversiones), se perfila como la odisea espacial (salvando las distancias argumentales) de este siglo.

Resulta especialmente imprescindible explicar que esta película no sigue los patrones habituales del medio, es decir, que aunque narra cómo un hombre (Sean Penn) hace balance de su infancia, en la que juegan un papel importantísimo su estricto padre (Brad Pitt) y su comprensiva madre (Jessica Chastain), también se dedica a explicar el origen del mundo (incluyendo distintas imágenes de volcanes en erupción o dinosaurios) de manera tan espiritual como onírica.

Diría que El árbol de la vida es puro cine experimental, de gran valor visual y sonoro (aquí los actores apenas tienen oportunidad de lucirse, tan sólo lo hacen Malick, el director de fotografía y el encargado de poner música a lo filmado por el primero), que desconcertará y enfadará a los que busquen un drama familiar al uso. ¿Estamos ante una pedantería hueca o ante una maravillosa obra maestra? Sinceramente, no lo sé. Yo diría que tiene un poco de ambas cosas. Lo que sí tengo claro es que su visionado es una experiencia única que no provocará indiferencia.

Lo mejor: Es una propuesta arriesgada.

Lo peor: Es una propuesta demasiado arriesgada.

Puntuación: 6/10.