The Blind Side (Un sueño posible)

Título original: The Blind Side. Año: 2009. País: Estados Unidos. Género: Drama. Director: John Lee Hancock. Guionista: John Lee Hancock (adaptando la novela de Michael Lewis). Intérpretes: Sandra Bullock, Quinton Aaron, Tim McGraw, Kathy Bates, Jae Head, Lily Collins. 

El tardío estreno en España de una película protagonizada por Sandra Bullock, que había sido un megaéxito en Estados Unidos y que venía abalada por varios reconocimientos (en su mayor parte destinados a su estrella femenina), me parecía de lo más extraño. Sin embargo, una vez vista no me sorprende tanto. En parte porque el tema de fondo (es decir, el fútbol americano) no despierta demasiado interés por estos lares, pero también porque resulta un producto de lo más convencional. En otras palabras: estamos ante otra de esas empalagosas y trilladas películas sobre la superación personal. Incluso iría más lejos, por su forma y fondo podría ser confundida con alguna de esas producciones que pueblan las parrillas televisivas cualquier mediodía, pero realizada con (mucho) más dinero y, por ende, más medios.

Basada en hechos reales, la historia se centra en la adopción de un joven afroamericano, Michael Oher (Quinton Aaron), por parte de una adinerada familia liderada por Leigh Anne Tuohy (Sandra Bullock). Así, asistimos a las bondades de la familia Tuohy y a la integración de Oher, quien poco a poco demostrará sus dotes para el deporte, concretamente para el fútbol americano, y los estudios. 

“Es usted una buena cristiana”, le espetan al personaje de Bullock, algo que resume muy bien las intenciones de la película. Porque sí, estamos ante una de esas producciones tan bienintencionadas y maniqueas que resultan evidentes desde el minuto uno (aunque al director le cueste unas dos horas contárnosla, ignorando que le sobran unos quince o veinte minutos de miraditas y dulzuras vacuas…). Ello no sería mayor problema si, además, la película no contase con una plana dirección (algo evidente en las escenas deportivas, a las cuales les falta dinamismo) y unos personajes poco desarrollados. Buen ejemplo de esto último son el resto de integrantes de la familia Tuohy, incluido el repelente crío (Jae Head), quienes funcionan como meras comparsas de nuestra protagonista, asintiendo y pululando alrededor suyo. Por no hablar de la triste participación de Kathy Bates. Pero el colmo es la cantidad de premios (Oscar incluido) obtenidos por Bullock. Puede que sea su mejor trabajo (lo cual no es mucho decir), pero desde luego está a años luz de merecerse tantos reconocimientos, ¿acaso los académicos no vieron el trabajo de Carey Mulligan?, ¿acaso no vieron otras interpretaciones? En fin, aunque los convencionalismos se adocenen, lo cierto es que al menos la película resulta tremendamente positiva y condescendiente. 

Lo mejor: Su positivismo. 

Lo peor: Que una película tan del montón haya obtenido tanta atención. 

Puntuación: 4/10.