Título original: Crank: High Voltage. Año: 2009. País: Estados
Unidos. Género: Acción. Directores: Mark Neveldine y Brian
Taylor. Guionistas: Mark Neveldine y
Brian Taylor. Intérpretes: Jason Statham, Amy Smart, Dwight
Yoakam, Efren Ramirez, Bai Ling, Clifton Collins Jr., David Carradine, Geri
Haliwell, Corey Haim.
La película da inicio justo donde
lo dejaba la anterior, es decir, con Chev Chelios (Jason Statham) tendido en el
suelo tras sufrir una espectacular caída. A partir de ahí somos testigos de
cómo a nuestro protagonista le quitan su (irónicamente valorado) corazón y lo
sustituyen por una batería que terminará con su vida cuando se descargue. Lo
que presenciaremos a continuación es más o menos lo mismo que presenciamos en
la entrega anterior: Chelios protagonizado una carrera a contrarreloj para
salvar su vida.
Statham y Smart repiten
personajes; el primero vuelve a ser lo mejor de la película (aunque ello no sea
muy difícil), mientras que ella se dedica a lucir palmito. Casi da lástima ver
a la actriz convertida en carnaza para pajilleros, porque lo cierto es que ésa
es la única razón de ser de su personaje.
Es cierto que estamos ante una película a la que no hay que tomarse muy en
serio, pero las situaciones son tan grotescas, las actuaciones tan estridentes
(Bai Ling, por ejemplo, parece actuar por espasmos) y los personajes tan
estereotipados que resulta difícil. Tampoco ayuda la dirección de Neveldine y
Taylor, la cual resulta tan exagerada que en lugar de agilizar la narración lo
que provoca es… jaqueca. Sin embargo, el mayor problema de la película es que
todos los defectos que contenía la primera parte se ven aquí multiplicados por
mil. A todo ello habría que añadir las tristes apariciones de Geri Halliwell
(la spice zorrona), Corey Haim (inolvidable
protagonista, muchas veces junto al inefable Corey Feldman, de algunas de las comedias juveniles casposas
más famosas de finales de los 80 y principios de los 90) y David Carradine (Kung
Fu, Kill Bill). Sólo apta para
incondicionales del género y fans de Statham.
Lo mejor: Statham.
Lo peor: Ya no la salva de la quema ni su sentido del humor.
Puntuación: 3/10.
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