Líbranos del mal

Título original: Deliver Us from Evil. Año: 2014. País: Estados Unidos. Género: Acción, Terror. Director: Scott Derrickson. Guionistas: Scott Derrickson y Paul Harris Boardman (adaptando el libro de Ralph Sarchie y Lisa Collier Cool). Intérpretes: Eric Bana, Edgar Ramírez, Olivia Munn, Joel McHale, Sean Harris.

Que nos os engañen, Líbranos del mal es más una película de acción y/o policíaca que de terror. Y no precisamente de las buenas (esas escenas en las que no se ve nada, esos sustos que se ven venir a leguas, esas persecuciones carentes de tensión…).

Basada en hechos reales (o eso indican), la cinta de Derrickson, quién ya había dirigido otra cinta de posesiones (¡y con mejores resultados!) titulada El exorcismo de Emily Rose (The Exorcism of Emily Rose), está protagonizada por Eric Bana, quien da vida a un agente de policía de Nueva York que traba amistad con un sacerdote (Edgar Ramírez) que le ayudará a resolver un extraño caso de lo que parecen ser posesiones demoníacas.

Son tantas las pegas que se le pueden poner a esta película que no sé ni por dónde empezar. 1) Las escenas de acción son caóticas. 2) Para colmo la fotografía es tan oscura que a veces ni podemos ver lo que está sucediendo en pantalla. 3) Lo del personaje arrepentido (ex-drogadicto en este caso) reconvertido en sacerdote es todo un cliché. Y así podría seguir durante un buen rato. Líbranos del mal no es ni de lejos la peor película de pseudo-terror que he visto, ni siquiera la peor película de exorcismos a la que me he enfrentado, pero sí una de las más aburridas y decepcionantes.

Lo mejor: Sale Eric Bana.

Lo peor: Los momentos ridículos superan a los terroríficos.

Puntuación: 3/10.