Título original: The Wraith. Año: 1986. País: Estados Unidos. Género: Intriga, Ciencia-Ficción. Director: Mike
Marvin. Guionista: Mike Marvin. Intérpretes: Charlie Sheen, Randy
Quaid, Nick Cassavetes, Sherilyn Fenn, David Sherrill, Matthew Barry, Jamie
Bozian Clint Howard, Griffin O’Neal, Steven Eckholdt, Christopher Bradley.
Hubo una época en
la que títulos como El aparecido
acababan cogiendo polvo en las estanterías de los videoclubs, tratando de
llamar la atención de pobres incautos (entre los que me incluyo) a través de su
portada o breve sinopsis.
El aparecido es otra de tantas películas ochenteras cercanas a la Serie B, cuyo nimio argumento es una simple excusa para narrar otra típica historia de buenos contra malos. Charlie Sheen (a quien, entiendo, no hace falta presentar) es el héroe de la función y Sherilyn Fenn (inolvidable Audrey en la serie Twin Peaks) la bella damisela en apuros. Nick Cassavetes (sí, el hijo de John Cassavetes y la musa de éste, Gena Rowlands), por su parte, encarna a Packard, el cabecilla de un grupo de tipejos aficionados a las carreras de coches que tienen atemorizado a todo un pueblo (como curiosidad señalar que apenas aparecen adultos durante el metraje, lo que da buena muestra de a quién está dirigida esta producción).
El encanto de este tipo de subproductos radica en su falta de pretensiones. Sin embargo, suelen estar llenos de tópicos y malas actuaciones. El trabajo que nos ocupa, a pesar de su solvente realización (especialmente por cómo se afrontan las distintas persecuciones), acaba resultando aburrido además de anodino. El aparecido es una cinta destinada a un público muy concreto. Básicamente, jovenzuelos que disfrutan con las películas de acción en las que priman las persecuciones. Es decir, para los mismos que hoy disfrutan de la inefable saga A todo gas (The Fast and the Furious); saga que, a diferencia de El aparecido (cuyo presupuesto no superó los raquíticos 3 millones de dólares) sí contó con muchos medios (léase millones de dólares; ya sólo la primera de las entregas costó cerca de 40 millones de dólares). Si no eres muy fan de este tipo de propuestas es mejor que te abstengas (que es lo que debería haber hecho servidor).
Lo mejor: Cómo están rodadas las
escenas de acción (es decir, las distintas carreras).
Lo peor: Lo dicho un poco más
arriba, es aburrida y anodina. Eso por no hablar de lo incongruentes que
resultan los personajes (e ilógicas sus decisiones).
Puntuación: 3/10.
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