El pasado mes de enero el propio
David Lynch anunciaba una noticia de lo más inesperada: Twin Peaks volvería, de la mano de Showtime, a antena en 2016 con nuevos capítulos. Dicha noticia
corrió como la pólvora entusiasmando a los muchos seguidores de la ya icónica
serie de los 90. Más todavía al saberse que detrás de la misma estaban las
mismas mentes: Mark Frost y, por supuesto, David Lynch.
Del argumento poco o nada (más
bien nada) se sabía (y poco o nada se sigue sabiendo), tan sólo que algunos
viejos personajes, como el agente Cooper (Kyle MacLachlan), iban a regresar.
Pero Lynch soltaba posteriormente una terrible bomba vía Twitter (medio por el que le encanta comunicarse): él no iba a
participar en esta especie de resurrección ya que no había llegado a un acuerdo
económico con la cadena. Por lo visto el presupuesto no era el adecuado para afrontar
el proyecto tal y como él quería. El pánico estaba servido entre los fans.
Hasta los actores de la serie original se movilizaron (seguramente aterrados
ante la idea de que la serie se cancelase) y rodaron un vídeo de apoyo al
genial realizador.
Afortunadamente todo ha quedado
en un susto (Twin Peaks sin David
Lynch no sería Twin Peaks, de eso no
hay duda) y el director de Cabeza
borradora (Eraserhead) ha asegurado (vía Twitter, claro) que finalmente se encargará de la que será la tercera
temporada de la serie. Y no sólo eso, sino que la misma tendrá una duración
mayor de la prevista (dieciocho episodios en lugar de nueve, tal y como han
informado las actrices Sheryl Lee y Sherilyn Fenn), contará con Angelo
Badalamenti (compositor de la banda sonora original) y Lynch se ocupará tanto
de co-escribirla como de dirigir todos y cada uno de sus capítulos.
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