Mayo, que no abril, es el más
cruel. Al menos para los “serieadictos”, ya que es cuando los grandes canales estadounidenses
anuncian cuáles de sus series van a ser renovadas y cuáles no. Este año han
caído, entre otras, Bad Judge (la
terrible vuelta a la televisión de Kate Walsh), Forever, Doctora en Alabama
(Hart of Dixie), Stalker o, y seguro
que la demoníaca Shonda Rhimes se está descojonando bien a gusto, Asuntos de estado (State of Affairs).
Muchas nos han dejado prematuramente; otras, como la que nos ocupa, hacía
tiempo que andaban en la cuerda floja (por eso su cancelación no ha supuesto
ninguna sorpresa).
Pero los seguidores de las desventuras
amorosas de la Dra. Lahiri (Mindy Kaling, creadora del programa) pueden
respirar tranquilos: la serie continuará, al menos durante una cuarta
temporada, gracias a que ha sido rescatada por Hulu (hasta ahora era Fox
quien se encargaba de producirla y emitirla). Además lo hará por todo lo
grande: con una temporada completa de 26 episodios.
El caso de esta serie es especial
pero no único. Anteriormente ya habían logrado algo parecido otras como Cougar Town (protagonizada por la ex-Friends, Courteney Cox), Futurama (que también empezó siendo
emitida por Fox), Daños y perjuicios (Damages) o dos de
las más famosas series de animación de Seth MacFarlane: Padre de familia (Family Guy), cancelada y recuperada por el mismo
canal (la omnipresente, al menos aquí, Fox),
y Padre Made in USA (American Dad!).
Pero para caso curioso el de Arrested
Development, serie de culto que emitía (¡cómo no!) Fox y que fue finiquitada al no traducirse sus múltiples reconocimientos
en grandes audiencias (los telespectadores eran fieles, pero no eran los
suficientes como para que la comedia protagonizada por tan peculiar familia
siguiera adelante) no sólo fue resucitada, en este caso por Netflix, sino que lo hizo… ¡varios años
después de su cancelación!
Y no quiero terminar este
artículo sin señalar una gran serie que también estuvo a punto de ser rescatada
por otro canal pero que, por desgracia, acabó engrosando la lista de teleseries
injustamente desaparecidas antes de tiempo: Finales felices (Happy Endings). Finales felices era una alocada y muy disparatada sitcom sobre seis amigos (sí, las
referencias a Friends eran
constantes) que, curiosamente, también contaba en su elenco con Adam Pally (el actor se incorporó a The Mindy Project durante su segunda temporada,
convirtiéndose de paso en uno de los personajes más apreciados por los fans).
¡Cómo añoro a tan disfuncional pandilla!
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