Un ciudadano ejemplar

Título original: Law Abiding Citizen. Año: 2009. País: Estados Unidos. Género: Intriga, Acción. Director: F. Gary Gray. Guionista: Kurt Wimmer. Intérpretes: Gerard Butler, Jamie Foxx, Colm Meaney, Leslie Bibb, Viola Davis, Bruce McGill, Michael Irby, Regina Hall, Annie Corley.

Un ciudadano ejemplar narra la venganza de un hombre (Gerard Butler) desamparado por la justicia tras el brutal asesinato de su familia. En esta ocasión el guión se decanta por construir un thriller de acción (lleno de explosiones, tiroteos y sangre, mucha sangre) en lugar de realizar una crítica socio-política o un melodrama familiar. Es decir, sigue el cauce de otros trabajos (cuyo eje central es la venganza personal, aunque sean muy distintos entre sí) como El cuervo (The Crow), Irreversible o Venganza (Taken), pero con la peculiaridad de que, a diferencia de la mayoría de producciones de este tipo, no es (como temía en un principio) una apología del ojo por ojo, sino que convierte a la “víctima” (es decir, al personaje de Butler) en el malo de la función.

Y es que el mencionado giro de guión (la víctima inicial para a ser el verdugo del largometraje) es lo que acaba determinando el género de la película de F. Gary Gray. Un trabajo que, aunque parezca lo contrario, no trata de polemizar sobre el bien o el mal ni sobre la situación del poder judicial. Simplemente funciona como intriga a la que no conviene dar demasiadas vueltas, ya que sus muchas incongruencias juegan, lógicamente, en su contra. 

Tampoco ayuda demasiado el funcional trabajo de sus actores, incluidos Foxx y Butler, cuyas escenas compartidas son terriblemente monótonas (su primera secuencia juntos resulta risible, interpretativamente hablando). A pesar de todo, Un ciudadano ejemplar se deja ver con agrado gracias a su excelente pulso narrativo, especialmente notable en las escenas de más tensión.

Lo mejor: Que el guión convierta a la víctima en verdugo.

Lo peor: Las escenas que comparten Butler y Foxx.

Puntuación: 5,5/10.