Título original: La piel que habito. Año: 2011. País: España.
Género: Intriga. Director: Pedro Almodóvar. Guionista: Pedro Almodóvar (adaptando
una novela de Thierry Jonquet). Intérpretes:
Antonio Banderas, Elena Anaya, Marisa Paredes, Jan Cornet, Blanca Suárez,
Bárbara Lennie, Eduard Fernández, Roberto Álamo.
Las películas de Almodóvar
siempre dan mucho de qué hablar. De ésta se comentaba que no era una adaptación
demasiado fiel (a mí no me importaba, puesto que no he leído la novela que
sirve como base) y que, además, poco tenía que ver con sus anteriores trabajos
(algo que puedo decir desde ya que no es del todo cierto).
De su trama es mejor conocer lo menos posible. Sólo diré que los protagonistas son Robert (Antonio Banderas), un eminente cirujano plástico torturado por un pasado familiar trágico; y Vera (Elena Anaya), una joven a la que éste mantiene retenida y con la que está experimentado un nuevo y revolucionario tejido.
La historia engancha desde el primer minuto (aunque algunas resoluciones se vean venir), los actores (incluido Banderas, quien no me suele gustar nada de nada) pueden presumir de haber salido fortalecidos de tan ardua tarea (imagino que no debe haber sido nada fácil ponerse en la piel, nunca mejor dicho, de tan complejos personajes) y la excepcional banda sonora (compuesta por el siempre genial Alberto Iglesias) funciona como perfectísimo acompañamiento. Almodóvar lo ha vuelto a hacer, La piel que habito es un trabajo fascinante. No perfecto, pero sí atrevido y atractivo.
De su trama es mejor conocer lo menos posible. Sólo diré que los protagonistas son Robert (Antonio Banderas), un eminente cirujano plástico torturado por un pasado familiar trágico; y Vera (Elena Anaya), una joven a la que éste mantiene retenida y con la que está experimentado un nuevo y revolucionario tejido.
La historia engancha desde el primer minuto (aunque algunas resoluciones se vean venir), los actores (incluido Banderas, quien no me suele gustar nada de nada) pueden presumir de haber salido fortalecidos de tan ardua tarea (imagino que no debe haber sido nada fácil ponerse en la piel, nunca mejor dicho, de tan complejos personajes) y la excepcional banda sonora (compuesta por el siempre genial Alberto Iglesias) funciona como perfectísimo acompañamiento. Almodóvar lo ha vuelto a hacer, La piel que habito es un trabajo fascinante. No perfecto, pero sí atrevido y atractivo.
Lo mejor: Engancha desde el principio.
Lo peor: Jan Cornet aparece en pantalla y la trama comienza a
despejarse.
Puntuación: 7/10.
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