Título original:
WALL•E. Año: 2008. País: Estados Unidos.
Género: Animación, Aventuras, Drama, Romance,
Ciencia-Ficción. Director: Andrew Stanton. Guionistas:
Andrew Stanton y Jim Reardon (adaptando
una historia de Andrew Stanton y Pete Docter). Con
las voces (en versión original) de: Ben
Burtt, Elissa Knight, Jeff Garlin, Fred Willard, John Ratzenberger,
Kathy Najimy, Sigourney Weaver, Pete Docter.
El planeta Tierra es
inhabitable debido a sus altos niveles de contaminación. Por ello
los humanos vagan por el espacio en una nave con toda clase de lujos
mientras ésta es limpiada por unos robots especialistas en ello.
Pero el tiempo pasa sin que se resuelva el problema y en el planeta
tan sólo queda ya WALL•E,
uno de dichos robots, quien, adoptando una actitud casi humana, se
dedica a realizar su trabajo al mismo tiempo que acumula objetos "de
valor" (coleccionándolos en su nave). Su rutina cambia cuando
un buen día recibe la visita de un modernísimo robot, de nombre
EVA, encargado de encontrar flora en el planeta, lo cual significaría
que los humanos podrían regresar a él...
Desde Pixar
nos han malacostumbrado a una animación preciosista y a historias
con moraleja (que no moralina); aptas todos los públicos pero lo
suficientemente complejas para conquistar también a un público más
adulto. El único pero (y ni eso) que se podría poner a sus
producciones es que, aun estando destinadas a un amplio abanico de
público, se ven abocadas a llamar la atención de los más pequeños,
bien sea incluyendo un chistoso pez de nombre Dori, como en Buscando
a Nemo (Finding Nemo), o a una intrépida niña, rodeada de
monstruos que más bien parecen muñecos de peluche, en Monstruos,
S.A. (Monsters, Inc.). En WALL•E ello sucede en menor
medida (o por lo menos resulta menos evidente/obvio).
El primer tercio de película es de una belleza arrebatadora, siendo, sin duda alguna, uno de los momentos cumbre de la compañía. Y además lo hace adoptando una posición de cuasi película muda. A su impresionante animación se une una banda sonora espléndida, un guión sólido y una bella historia de amor y amistad más compleja de lo que pudiese parecer a simple vista (¡Ay, ese "bailecito" en el espacio!). A ello contribuye sobremanera el diseño del personaje principal. WALL•E resulta ser una suerte de mezcla entre Cortocircuito (Short Circuit) y E.T., capaz de expresar de manera convincente (¡esos enormes ojos!) los sentimientos más humanos y, lo que es más importante, transmitirlos al espectador. WALL•E es, a pesar de la dura competencia, mi película favorita de Pixar.
Lo mejor: Unos
primeros minutos sobresalientes.
Lo peor: La
segunda mitad de la película no está al mismo nivel que la primera.
Le pasa un poco lo que a Up,
pierde algo de fuerza cuando se decanta por su vertiente más
aventurera.
Puntuación: 9/10.
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