Título original: 28 Weeks Later. Año: 2007. País: Reino Unido. Género: Terror. Director: Juan Carlos Fresnadillo. Guionistas: Juan Carlos Fresnadillo,
Rowan Joffe, Jesús Olmo y Enrique López Lavigne. Intérpretes: Jeremy Renner, Robert Carlyle, Rose
Byrne, Harold Perrineau, Idris Elba, Imogen Poots, Catherine McCormack,
Mackintosh Muggleton, Emily Meecham, William Meredith.
Juan Carlos
Fresnadillo, director español nominado al Oscar por su cortometraje titulado Esposados, construye esta atípica
secuela cuyos únicos puntos en común con la entrega original, 28 días después (28 Days Later),
residen en una trama que continúa relatando la epidemia que, tal y como vimos
en la cinta de Boyle, ha asolado las Islas Británicas. Pero 28 semanas después puede ser
disfrutable aun desconociendo la cinta original, ya que es una continuación que
toma el relevo pero se olvida de personajes y situaciones. Aquí se nos narra la
rehabilitación del país tras la supuesta desaparición de la epidemia, así como
la llegada de Andy (Mackintosh Muggleton) y Tammy (Imogen Poots), hijos de Don
(Robert Carlyle), uno de los supervivientes de la amenaza zombi. A Robert
Carlyle (Trainspotting) lo acompañan
intérpretes como Jeremy Renner, Ojo de Halcón en las películas de Los
Vengadores (The Avengers) y nominado al Oscar por En
tierra hostil (The Hurt Locker) y Ciudad
de ladrones (The Town), Rose Byrne, actriz todoterreno que pasa de la
comedia, La boda de mi mejor amiga
(Bridesmaids), al terror, Insidious,
con total naturalidad o Idris Elba (Luther,
RocknRolla,
Prometheus, Thor,
Pacific Rim).
Los primeros minutos de la película (y dejo ya de hablar de su reparto y de sus respectivas carreras interpretativas) son, sin ninguna duda, los mejores (y más asfixiantes); a partir de ahí el ritmo decae, manteniendo el interés de manera intermitente, y cuando lo recupera suele ser gracias a la excelente labor de Fresnadillo, quien sabe imprimir la suficiente tensión a los momentos cumbres de la historia, la cual resulta eficaz gracias a subtramas como la que tiene que ver con ciertos humanos que aparentemente son "inmunes" a la epidemia y cuya sangre podría ayudar a crear alguna especie de vacuna (aunque solo sea por lo que tiene de diferente a otras películas de temática similar).
Recapitulemos: tenemos un más que correcto plantel de actores (sorprende ver en la secuela de una película de terror a intérpretes del calibre de Robert Carlyle), una historia con varios puntos de interés (a destacar la subtrama que mencionaba antes) y unos efectos especiales y de maquillaje más que cumplidores. 28 semanas después es una curiosa película de terror que no escatima en escenas sangrientas (y un tanto amorales: ¡esos soldados que disparan indistintamente a civiles estén o no infectados!) y que cuenta con momentos realmente logrados (aunque demasiado dispersos durante el relato) y con un devenir al que se le perdona que juegue demasiado con las coincidencias y con algún que otro topicazo.
Los primeros minutos de la película (y dejo ya de hablar de su reparto y de sus respectivas carreras interpretativas) son, sin ninguna duda, los mejores (y más asfixiantes); a partir de ahí el ritmo decae, manteniendo el interés de manera intermitente, y cuando lo recupera suele ser gracias a la excelente labor de Fresnadillo, quien sabe imprimir la suficiente tensión a los momentos cumbres de la historia, la cual resulta eficaz gracias a subtramas como la que tiene que ver con ciertos humanos que aparentemente son "inmunes" a la epidemia y cuya sangre podría ayudar a crear alguna especie de vacuna (aunque solo sea por lo que tiene de diferente a otras películas de temática similar).
Recapitulemos: tenemos un más que correcto plantel de actores (sorprende ver en la secuela de una película de terror a intérpretes del calibre de Robert Carlyle), una historia con varios puntos de interés (a destacar la subtrama que mencionaba antes) y unos efectos especiales y de maquillaje más que cumplidores. 28 semanas después es una curiosa película de terror que no escatima en escenas sangrientas (y un tanto amorales: ¡esos soldados que disparan indistintamente a civiles estén o no infectados!) y que cuenta con momentos realmente logrados (aunque demasiado dispersos durante el relato) y con un devenir al que se le perdona que juegue demasiado con las coincidencias y con algún que otro topicazo.
Lo mejor: Cómo mantiene el tipo;
como película de zombis, pero también como secuela.
Lo peor: Es una continuación
rupturista y yo prefiero las secuelas que recuperan personajes y continúan con
sus historias.
Puntuación: 6/10.
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