Freddy contra Jason

Título original: Freddy vs. Jason. Año: 2003. País: Estados Unidos. Género: Terror, Acción, Comedia. Director: Ronny Yu. Guionistas: Damian Shannon y Mark Swift. Intérpretes: Robert Englund, Monica Keena, Jason Ritter, Ken Kirzinger, Kelly Rowland, Odessa Munroe, Lochlyn Munro, Katharine Isabelle, Chris Marquette, Brendan Fletcher, Zack Ward.

Freddy Krueger (Robert Englund) y Jason Voorhees (Ken Kirzinger), dos de los asesinos en serie más famosos del cine de terror, unen fuerzas (a su manera) para seguir cometiendo todo tipo de fechorías. La trama, en la que Krueger busca servirse de Voorhees para que los jóvenes no se olviden de él y poder seguir liquidándolos sin piedad, es, en realidad, una tonta excusa como otra cualquiera para continuar con las matanzas de tan populares personajes (y sacarles rédito, claro).

Quien se acerque a Freddy contra Jason pensando que va a encontrarse con un slasher similar al de cualquiera de los títulos que conforman ambas franquicias, es decir, Pesadilla en Elm Street (A Nightmare on Elm Street) y Viernes 13 (Friday the 13th), se llevará una gran decepción. Y es que la película tiene un claro enfoque cómico (e incluso de cine de acción, véase la escena en la que se enfrentan los personajes principales), no en vano el director es Ronny Yu, quien ya convirtió en (todavía más) comedia otra popular saga cuando dirigió La novia de Chucky (The Bride of Chucky).

¿Es Freddy contra Jason una buena película? No, de ninguna manera. Pero sí es puro divertimento desprejuiciado, perfecto para pasar un buen rato y disfrutar con las andanzas de un insufrible grupúsculo de jovenzuelos, entre ellos la pseudo-estrella (lo siento) de la música Kelly Rowland, Katharine Isabelle (Ginger Snaps, la recomendable película de licántropos cercana a la Serie B) y Monica Keena, la mala influencia de Jen (Michelle Williams) en Dawson crece (Dawson's Creek); grupúsculo que se pasea, sin pena ni gloria (nota: las actrices antes señaladas acabaron echando pestes de la película y de su experiencia trabajando en ella), a la espera de ser despedazados por las verdaderas estrellas de la función. Por contra, seguramente decepcione a los fans más intransigentes de ambos personajes, ya que la imagen que Ronny Yu ofrece de ellos es más caricaturesca que nunca (que ya es decir). Acérquense a Freddy contra Jason sabiendo lo que se van a encontrar: una comedia de terror a la que no hay que tomarse ni mínimamente en serio. Sólo así podrán disfrutarla como yo (a pesar de todo, ¡y es mucho!) lo hice.

Lo mejor: Es un guilty pleasure total. Servidor la vio en el cine y salió tan pichi.

Lo peor: El tono no parece el adecuado. Vale, a Freddy ya lo habían medio convertido en un bufón, ¡pero es que aquí se le suma el seco de Jason!

Puntuación: 5/10.