Título original: The Change-Up. Año: 2011. País: Estados
Unidos. Género: Comedia Fantasía. Director: David Dobkin. Guionistas: Jon Lucas y Scott Moore. Intérpretes: Jason Bateman, Ryan
Reynolds, Olivia Wilde, Leslie Mann, Alan Arkin, Craig Bierko, Ned Schmidtke,
Ming Lo, Mircela Monroe, Gregory Itzin.
Películas sobre gente que
intercambia sus cuerpos hay un ciento: De
tal astilla… tal palo (Like Father, Like Son), Ponte en mi lugar (Freaky Friday), Este cuerpo no es el mío (The Hot Chick)… Pero en la que nos ocupa,
y a diferencia de lo que ocurría en las mencionadas, son dos amigos, Dave
(Jason Bateman) y Mitch (Ryan Reynolds), los que acaban intercambiado sus respectivos
cuerpos.
La gracia reside en que el primero es un responsable padre de familia, cuyos
días de juerga ya han quedado atrás, mientras que el segundo es un tipo que no
ha sentado cabeza y que malvive trabajando en toda suerte de subproductos
pseudoeróticos (sic).
Este flojísimo, terriblemente soez y lleno de clichés trabajo no valdría un
duro de no ser por su pareja protagonista (Bateman y Reynolds son dos actores
dotadísimos para el género). Aunque, sinceramente, ni ellos pueden resolver
este desastre en forma de comedia grosera mil veces vista (sus múltiples gags o
no funciona o ya los tenemos demasiado vistos) y mil veces aborrecida.
Lo mejor: Su pareja protagonista.
Lo peor: Es otra vuelta de tuerca a una historia que hemos visto
demasiadas veces.
Puntuación: 3/10.
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