La decisión de Anne

Título original: My Sister’s Keeper. Año: 2009. País: Estados Unidos. Género: Drama. Director: Nick Cassavetes. Guionistas: Nick Cassavetes y Jeremy Leven (adaptando una novela de Jodi Picoult). Intérpretes: Cameron Diaz, Abigail Breslin, Sofia Vassilieva, Jason Patric, Evan Ellingson, Alec Baldwin, Joan Cusack, Thomas Dekker.

 

Películas sobre enfermos terminales hay a patadas. Es (todo) un subgénero que suele caer en sentimentalismos obvios, buscando a la desesperada la lagrimilla del espectador. La decisión de Anne, que nos cuenta cómo una niña (Abigail Breslin) que fue concebida para que pudiese ayudar a su hermana (Sofia Vassilieva), enferma de cáncer, se rebela, viene a confirmar mi teoría. 

 

 

Cassavetes (hijo de los reputados Gena Rowlands y John Cassavetes), quien logró cierta notoriedad con otro melodrama que resultó todo un éxito, la empachosa El diario de Noa (The Notebook), no logra contener el tono excesivamente meloso de este drama familiar. Flaco favor hace el abuso de la voz en off (¿de verdad era necesario que tantos personajes se expresasen de dicha forma?) o la colección de canciones melancólicas que sólo sirven para adornar de mala manera los momentos más intensos y/o tristes.

 

 

Esta suerte (es un decir) de mezcla entre cine familiar y cine judicial está protagonizada por Cameron Diaz, pero son los actores más jóvenes (con una experimentada Abigail Breslin a la cabeza) los que llevan el peso interpretativo y los que, además, mejor lo hacen. Ellos, junto a ciertos dilemas que plantea (aunque no los desarrolle, a mi parecer, de la manera más acertada; todo el tema judicial se hace ciertamente pesado y a veces hasta un tanto molesto/impertinente) esta La decisión de Abne son, sin duda alguna, lo mejor de la misma. 

 

 Lo mejor: Que no sea la típica película bienintencionada sobre enfermos (más por las cuestiones que plantea que por cómo las plantea, insisto). 

 

Lo peor: Su irregular casting adulto (lo siento, no venero ni a Patrick, aka Mr. Speed 2, ni a Diaz). Eso, el abuso de la voz en off y ciertos momentos lacrimógenos impostados. 

 

Puntuación: 5/10.