Los falsificadores

Título original: Die Fälscher. Año: 2007. País: Austria. Género: Drama. Director: Stefan Ruzowitzky. Guionista: Stefan Ruzowitzky (adaptando una historia de Adolf Burger). Intérpretes: Karl Markovics, August Diehl, Devid Striesow, Martin Brambach, August Zirner, Sebastian Urzendowsky, Andreas Schmidt. 

 

Los falsificadores no es realmente otro drama sobre el Holocausto. Bueno, sí pero no. Lo que quiero decir es que, aunque la trama tenga como protagonistas a nazis y judíos, pone el foco en un núcleo de acción un tanto distinto al visto en otras producciones de similar índole.

 

 

 

El largometraje de Stefan Ruzowitzky nos narra cómo un grupo de judíos, capitaneados por Salomon Sorowitsch (Karl Markovics), reconocido falsificador, son obligados a reproducir todo tipo de documentos para los nazis (desde pasaportes hasta… dólares). Así, pasarán a tener una posición privilegiada (dentro de lo que cabe, obviamente) pero se les acumularán los dilemas morales, puesto que si logran realizar con éxito su cometido (es decir, fabricar dinero) el poder de sus captores aumentaría considerablemente... 

 

 

Los falsificadores es una buena (casi notable) película que se beneficia del acertado trabajo de sus actores y de un igualmente correcto apartado técnico (sirva como ejemplo su fría fotografía). Pero le falta algo esencial: emotividad (en general es más fría que su fría fotografía). Y ello a pesar de que las miserias, humillaciones (véase cuando uno de los nazis orina sobre Sorowitsch) e injusticias son temas que centran la trama de la misma. El titubeante trabajo de Ruzowitzky tras las cámaras (no se decide y opta por un tratamiento a lo Lars von Trier, pero más desganado) tampoco es que sea de gran ayuda. La historia, eso sí, no tiene desperdicio y denota cierta “novedosidad” que la hace especialmente atractiva (hasta el punto de lograr que olvidemos/perdonemos todos esos peros que podríamos ponerle a la cinta). Nota: se hizo con el Oscar a mejor película de habla no inglesa. 

 

Lo mejor: Un punto de vista más bien atípico. 

 

Lo peor: Que sea un tanto aséptica (imperdonable en un drama que toca un tema tan delicado). 

 

Puntuación: 7/10.