Título original: Mother, May I Sleep with Danger? Año: 2016. País: Estados Unidos. Género:
Drama, Intriga, Terror. Directora: Melanie
Aitkenhead. Guionista: Amber Coney
(adaptando una historia de James Franco). Intérpretes: Emily Meade, Leila George, Nick
Eversman, Tori Spelling, Amber Coney, Hadley Winn, Sedona Feretto, Ivan Sergei,
James Franco.
Mother, May I Sleep with Danger?, remake (muy sui géneris) de la telepelícula de mismo título (al menos en su
versión original) protagonizada por Tori Spelling e Ivan Sergei (ambos con
papeles secundarios en esta ocasión; Spelling interpretando a la madre de nuestra
nueva protagonista, Leila George, y Sergei como uno de sus profesores), se
presentaba como uno de los grandes guilty
pleasures de la temporada.
Y es que el multidisciplinar (lo
mismo escribe un libro de relatos cortos que graba un disco homenaje a The
Smiths) James Franco, con motivo del vigésimo aniversario de la obra original,
decide darle una vuelta de tuerca a la historia de joven (papel que encarnó
Spelling en la versión de 1996) cuya pareja (Ivan Sergei) se destapa como todo
un psicópata. En esta ocasión es Tori la que descubre horrorizada que el amor
(lésbico) de su hija (Leila George) es en realidad… ¡una vampira (Emily Meade,
actriz vista en la primera temporada de The
Leftovers o seduciendo a su padre cinematográfico, Dylan McDermott, en la
raruna Burning Palms, futura
película de culto)!
Y todo ello bajo el halo
protector del canal Lifetime. El
mismo que ha ido mutando su programación original: comenzó produciendo dramones
televisivos de hora y media; ahora emite telepelículas dedicadas a narrar los
entresijos de algunas de las teleseries más populares de los 80 y 90 o, lo que
resulta más sorprendente y plausible, parodiando su propio sello de identidad
con trabajos como el que nos ocupa o Adopción
peligrosa (A Deadly Adoption), en el que Will Ferrell y Kristen Wiig deben
lidiar con una lunática madre de alquiler (Jessica Lowndess). Con un más que claro
mensaje en contra del heteropatriarcado (la nueva palabra de moda), Mother, May I Sleep with Danger? funciona
mejor (o únicamente) como la enésima travesura made by Franco que como thriller lésbico, parodia y/o película de
vampiros. Y sí, Spelling vuelve a obsequiarnos con su inexpresividad y con
algunas de las escenas más memorables de la función (verla camuflarse entre los
árboles mientras espía a su hija no tiene precio).
Lo mejor: Emily Meade y Leila George.
Lo peor: Que se quede más cerca de Satan School (Satan’s School for Girls), el remake, protagonizado
por una de las grandes amienemigas de Spelling, Shannen Doherty, de la telepelícula
de semi-culto Escuela satánica para
señoritas (Satan’s School for Girls), que de ese bizarro remix que prometía
su sinopsis (o su genialísimo poster).
Puntuación: 4,5/10.
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