Thor: El mundo oscuro

Título original: Thor: The Dark World. Año: 2013. País: Estados Unidos. Género: Acción, Fantasía, Ciencia-Ficción. Director: Alan Taylor. Guionistas: Christopher Markus, Christopher L. Yost y Stephen McFeely (adaptando las historias de los personajes creados por Stan Lee y Jack Kirby). Intérpretes: Chris Hemsworth, Natalie Portman, Tom Hiddleston, Anthony Hopkins, Stellan Skarsgård, Jaimie Alexander, Ray Stevenson, Idris Elba, Kat Dennings, Zachary Levi, Tadanobu Asano, Rene Russo, Chris O’Dowd, Adewale Akinnuoye-Agbaje, Alice Krige, Chris Evans, Stan Lee.

Me gustan las películas de Los Vengadores (The Avengers). Sin embargo, las historias protagonizadas por sus integrantes no me terminan de convencer. Y las de Thor son seguramente las que menos.  

Puede que sea por sus historias de capa y espada, demasiado serias pero a la vez demasiado infantiles. Puede que sea por su protagonista (no le pido que sea un chistoso como Iron Man, pero Capitán América tampoco lo es y me resulta más tolerable; es más, agradezco enormemente los escasos momentos cómicos de la cinta, véase la escena del metro, por el soplo de aire fresco que suponen). Puede que sea por el uso y abuso de los efectos especiales (sí, sé que estamos ante una cinta de aventuras y ciencia-ficción cuya acción tiene lugar en otros mundos). El caso es que las aventuras de los habitantes de Asgard no me terminan de enganchar.

Sí, los efectos especiales son tremendamente llamativos. Sí, el casting está repleto de nombres de lo más respetados (Hopkins, Skarsgård, Portman, Russo) que tratan de dar entidad a unos personajes en ocasiones un tanto planos. Sí, las peleas están rodadas con brío. Y sí, por fortuna dura menos de dos horas. Pero no, Thor: El mundo oscuro no me entusiasma. No lo hizo la primera y no lo hace ésta.

Lo mejor: No me quedé dormido, a diferencia de lo que me pasó con la primera.

Lo peor: Los diálogos.

Puntuación: 4/10.