miércoles, 18 de octubre de 2017

Blade Runner 2049

Título original: Blade Runner 2049. Año: 2017. País: Estados Unidos. Género: Ciencia-Ficción. Director: Denis Villeneuve. Guionistas: Michael Green y Hampton Fancher. Intérpretes: Ryan Gosling, Harrison Ford, Ana de Armas, Jared Leto, Dave Bautista, Robin Wright, Edward James Olmos, Hiam Abbass, Mackenzie Davis, Carla Juri, Lennie James, Sean Young.

Cuando se confirmó esta tardía secuela del clásico de Ridley Scott, muchos nos echamos las manos a la cabeza. Habían trascurrido más de 30 años desde el estreno de la obra original y, lo que es más importante, ¿acaso había necesidad de mancillar el legado de la que (casi) todo el mundo considera una de las obras de cinematográficas de ciencia-ficción más importantes de las últimas décadas? No era la primera vez que se nos “amenazaba” con una continuación que ya nadie esperaba/deseaba, pero, tras darse a conocer los primeros datos (y talentos implicados) parecía que esta vez sí estábamos ante un proyecto destinado a llegar a buen puerto. Lo bueno: saber que Ryan Gosling (La La Land) la iba a protagonizar (con Harrison Ford repitiendo papel) y que Denis Villeneuve, director de Incendies (nominada al Oscar en la categoría de mejor película de habla no inglesa) o La llegada (Arrival), la última sensación dentro (y fuera) del género (ganadora de un Oscar y nominada hasta en otras siete categorías, incluyendo mejor películas y mejor director), se situaría tras las cámaras. 


¡Había esperanza! Esperanza que se transformó en ilusión cuando comenzaron a filtrarse algunas imágenes (y/o trailers) y, sobre todo, ante unas primeras críticas entusiastas que precisaban que hacía justicia a la película de 1982. Y sí, Blade Runner 2049 acabó aupándose a lo más alto de la taquilla americana. Aunque sí, la cifra obtenida (algo menos de 33 millones de dólares; recordemos que su presupuesto está estimado en unos 150) tampoco fue como para echar cohetes. La acción, porque ya toca hablar un poco sobre la trama de la cinta, se sitúa unos 30 años después de lo acontecido en la primera y nos presenta a K (Ryan Gosling), un Blade Runner obsesionado por dar con el paradero de Rick Deckard (Harrison Ford), desaparecido misteriosamente desde hace, claro, 30 años, tras descubrir un secreto que amenaza con desatar el caos más absoluto. Destacar, como curiosidad, que a Gosling y Ford los acompañan, además de Robin Wright (Forrest Gump, Wonder Woman, House of Cards), Dave Bautista, Drax en Guardianes de la galaxia (Guardians of the Galaxy) y su secuela, o Jared Leto (ganador del Oscar, en la categoría de mejor actor de reparto, por Dallas Buyers Club), la actriz Ana de Armas, famosa por estos lares (España) por haber sido una de las protagonistas de la teleserie de misterio El internado o por bodrietes estilo Mentiras y gordas, como principal reclamo femenino.


Villeneuve sabe que tiene la difícil tarea de contentar a toda una legión de fans, por ello se muestra precavido (léase respetuoso) sin, eso sí, renunciar a dar entidad (y su propio toque estilístico) a una película que tiene que lograr atraer tanto a esos fans como a otros menos iniciados; recupera la atmosfera de la cinta original (y lo hace realmente bien; todo el trabajo de producción sólo puede ser catalogado de excepcional) y la dota de nuevos bríos, aunque acusa una frialdad generalizada que la aleja de esa poesía cuasi lírica que nos encandiló (al menos a servidor) en la cinta de Scott. Tal vez ése sea el mayor pero que se le pueda poner a una película que, en general, ha demostrado saber encontrar su lugar haciendo justicia a una obra reconvertida en clásico del género. Lo dicho, Villeneuve lo tenía francamente complicado y, sin embargo, ha salido airoso de tan compleja tarea, logrando dar con una fórmula casi magistral que añade nuevas vías (aprovecho para recordar que también hay 3 cortos, uno de ellos de animación, que narran sucesos que acontecen antes de la cinta; si bien, su visionado no es necesario para poder disfrutar de ella al 100%) y nuevos intereses a una historia que dejaba (para bien) muchos frentes abiertos. Blade Runner 2049 no es sólo una secuela magistral, es una película de ciencia-ficción tan estimable como estimulante. ¿Necesaria? Tal vez no. ¿Recomendable? Muy mucho.

Lo mejor: Es una maravilla para los sentidos. Recupera buena parte del encanto de la cinta de Scott. Los decorados, vestuario y, en general, todo su apartado técnico resulta brillante. También que cuente con personajes femeninos que van más allá de la mera comparsa. Mención especial merece su acertado casting, con Gosling (uno de los actores en activo más versátiles y dotado) a la cabeza y un Ford necesariamente (¡y yo que me alegro!) recuperado para la causa.

Lo peor: Su, un tanto aséptica (ni épica ni poética), banda sonora o su frialdad generalizada (a pesar de contar con un buen puñado de escenas sentimentales y/o románticas; protagonizadas, en su inmensa mayoría, por el personaje de Ana de Armas). Y sí, casi todo lo que tiene que ver con el personaje de Jared Leto (cuyo papel estaba pensado para que lo interpretara en un principio el mismísimo David Bowie).

Puntuación: 8/10.

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