sábado, 4 de mayo de 2019

Adventureland

Título original: Adventureland. Año: 2009. País: Estados Unidos. Género: Drama, Comedia, Romance. Director: Greg Mottola. Guionista: Greg Mottola. Intérpretes: Jesse Eisenberg, Kristen Stewart, Ryan Reynolds, Martin Starr, Bill Hader, Kristen Wiig, Margarita Levieva, Martin Schienle, Josh Pais.

Siento especial debilidad por las películas generacionales; aquellas que reflejan el paso de la adolescencia a la madurez; las que hablan de primeros amores (experiencias que acaban fortaleciendo y conflictos varios que acabarán marcando el futuro carácter del antihéroe de la función). Ese tipo de experiencias que directores como John Hughes, Kevin Smith o Richard Linklater han sabido retratar de manera más que digna, sin caer en estereotipos o burlas tan comunes en este tipo de producciones.


Pues bien, afortunadamente Adventureland tiene el encanto propio de esas películas que me gustan. Así pues, tenemos un protagonista, James Brennan (Jesse Eisenberg), cuyos planes de viajar por Europa se ven trastocados por culpa de la débil economía familiar. Ello le lleva a trabajar en un destartalado parque de atracciones. Allí conocerá a todo un abanico de personajes que harán mella en él. Especialmente la extrovertida y enigmática Em (Kristen Stewart, demostrando que es capaz de encandilar a alguien más que a vampiros y hombres lobo). También conocerá la verdadera amistad de la mano del entrañable Joel (Martin Starr), a la sexy Lisa P. (Margarita Levieva) o al idolatrado Mike (Ryan Reynolds, Deadpool).


A pesar de lo tópico de su argumento, y de su previsible devenir, la película tiene el encanto propio de cualquier relato de maduración y aleccionamiento. Ello significa que, a lo largo de su algo más de hora y media de duración, seremos testigos de lo importante que es no dejarse llevar por las apariencias, las cuales nos pueden conducir a engaño, así como saber separar a las verdaderas amistades de aquellas que sólo pretender aprovecharse de uno. A pesar de tratar dichos temas, la película no pretende ser, ni muchísimo menos, moralista (véase por ejemplo, como a nuestro protagonista le llega todo una colección de porros; colección que le sirve como excusa para entablar algunas amistades). Si a todo esto sumamos la correcta dirección de Mottola y unos igualmente correctos actores, así como algún que otro momento divertido (el baño de James y Em en la piscina), triste (la historia de la madre de Em) o romántico, pero no ñoño (la conversación entre los protagonistas en el coche), el resultado obtenido es Adventureland, una propuesta de lo más loable.

Lo mejor: Tiene encanto; mucho encanto.

Lo peor: Un desenlace un tanto clásico.

Puntuación: 6/10.

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