lunes, 17 de abril de 2023

Serpientes a bordo

Título original: Silent Venom. Año: 2009. País: Estados Unidos. Género: Acción, Intriga, Terror. Director: Fred Olen Ray. Guionista: Mark Sanderson. Intérpretes: Luke Perry, Krista Allen, Tom Berenger, Louis Mandylor, Anthony Tyler Quinn, John L. Curtis, Robert Catrini, David Andriole. 
 
Serpientes a bordo vendría a ser la respuesta hipercasposa a esa Serie B con ínfulas titulada Serpientes en el avión (Snakes on a Plane), sólo que se sustituye el medio de transporte y a Samuel L. Jackson por Luke Perry. Además, los efectos especiales son tan cutres que avergonzarían al mismísimo Ed Wood (atención a la serpiente madre, hermana desnutrida y purulenta de la que protagonizó la igualmente risible Anaconda). Por cierto, el pobre Tom Berenguer también se deja caer por pantalla. Dirige el inefable Fred Olen Ray: Twilight Vamps, Bikini Frankenstein, Super Shark.
 
 
La historia, por llamarla de algún modo, nos muestra cómo un grupo de personas, lideradas por los personajes de Luke Perry y Krista Allen, quien da vida a una científica que nada tiene que envidiar (ejem) a la Tara Reid de Alone in the Dark o a la Denise Richards de El mundo nunca es suficiente (The World is Not Enough), deben lidiar con unas venenosísimas serpientes que han escapado mientras eran trasladadas en submarino. Pero al grano, este trabajo (con sus bochornosos diálogos, sus terribles interpretaciones y su penoso acabado) sólo puede ser catalogado de diarreico. Recomendaría huir de él como de la peste. 
 
Lo mejor: Al menos me reí con la escena en la que nuestro protagonista choca contra una escalera mientras lucha con la serpiente más grande. Y es que no hay nada como el humor involuntario. 
 
Lo peor: Prácticamente todo lo demás. 
 
Puntuación: 1/10.

No hay comentarios:

Publicar un comentario