La zona muerta

Título original: The Dead Zone. Año: 1983. País: Estados Unidos. Género: Intriga, Ciencia-Ficción. Director: David Cronenberg. Guionista: Jeffrey Boam (adaptando una novela de Stephen King). Intérpretes: Christopher Walken, Martin Sheen, Tom Skerritt, Brooke Adams, Simon Craig, Herbert Lom.

Stephen King puede presumir de ser uno de los escritores más adaptados. Gran parte de su amplísima obra ha conocido traslación cinematográfica o televisiva. Pero la triste realidad dice que la mayoría de dichas adaptaciones han dejado bastante que desear. Incluso en esta, que tiene detrás a un cineasta tan interesante como Cronenberg, el resultado final no pasa de correcto, siendo la labor de éste y la del actor principal lo mejor de la función. 

La historia está protagonizada por Christopher Walken, quien da vida a un profesor que tras sufrir un accidente permanece en coma durante cinco años. Tras despertar comprueba que posee un poder extrasensorial que le permite, al contacto con otras personas, conocer sucesos pasados o futuros.

En principio, la unión de King y Cronenberg podría parecer de lo más sugerente, pero lo cierto es que, tal y como indiqué anteriormente, no acaba de cumplir con mis expectativas. Quizá el problema sea que la fuerte personalidad del director queda relegada aquí a un segundo plano. Seguramente (aunque eso no es excusa, ya que el popular realizador ha trabajado en muchísimas ocasiones con material externo) porque la historia no parte de un guión propio. Además, el apartado técnico (banda sonora, fotografía…) luce terriblemente obsoleto, mientras que su base literaria parece más predispuesta al formato televisivo (recordemos que Anthony Michael Hall protagonizó durante seis temporadas una serie basada en la misma novela), ya que de ese modo se puede desarrollar en profundidad la historia de nuestro protagonista a través de distintas misiones en lugar de reducirla al, mucho más limitado (temporalmente hablando), lenguaje cinematográfico. La zona muerta no terminó de satisfacerme a pesar de los muchos puntos a favor que encontré en ella.

Lo mejor: La curiosa unión Cronenberg-King.

Lo peor: La sensación de que no estamos ante el formato adecuado para narrar bien semejante trama.

Puntuación: 5,5/10.