La batalla de Mary Kay (TV)

Título original: Hell on Heels: The Battle of Mary Kay. Año: 2002. País: Canadá. Género: Comedia. Director: Ed Gernon. Guionista: Patricia Resnick. Intérpretes: Shirley MacLaine, Parker Posey, Shannen Doherty, R.H. Thomson, Barry Flatman, Rachael Crawford, Dean McKenzie, Marnie McPhail, Rebecca Gibson, Catherine Fitch, Maggie Butterfield, Terri Cherniak, Toby Kennett.

 

Shirley MacLaine (nominada al Globo de Oro, a mejor actriz principal en un telefilm) protagoniza este atípico biopic. Atípico por su tono puramente cómico (casi paródico, sobre todo cuando hace acto de presencia el personaje de Shannen Doherty), en contraposición a las formales y serias películas que retratan las vidas de personas reales. MacLaine interpreta a la famosa empresaria Mary Kay, centrándose la historia en la lucha que mantiene contra una nueva rival en el negocio de los cosméticos, la enérgica Jinger (Parker Posey, también nominada al Globo de Oro, en la categoría de mejor actriz de reparto en un telefilm).

 

 

Su acabado y su tono la diferencian de otras biografías; también de otros productos televisivos. Ello se nota en los más que correctos trabajos de dirección y montaje. Sirva como ejemplo su introducción, una suerte de parodia de Ciudadano Kane (Citizen Kane), y el gusto del director por dividir la pantalla para mostrarnos distintas perspectivas o situaciones. La comicidad que destila el guión también es todo un acierto, sobre todo si tenemos en cuenta su, a priori, poco interesante (al menos para servidor) argumento, el cual, además, contiene varios altibajos (aunque ninguno demasiado reseñable, así que no se preocupen).

 

 

La batalla de Mary Kay no pasaría de aceptable sin el magnífico trabajo de su trío femenino protagonista. MacLaine encarna con sobriedad y desparpajo el papel principal; Posey le sirve como excelente contrapunto; Doherty (a pesar de las pelucas que luce) protagoniza las escenas más hilarantes (véase la pelea en el supermercado) dando vida a una obsesiva seguidora de Mary Kay (hace suyo el personaje más histriónico). Ellas son lo mejor de una película cuya comicidad a veces se muestra dispersa (bordea el tono paródico una y otra vez) pero que se destapa como una producción de lo más entretenida.

 

Lo mejor: Su trío protagonista. Todas ellas se luces; cada una a su manera.

 

Lo peor: Ciertas caídas de ritmo.

 

Puntuación: 6,5/10.