El cuervo

Título original: The Crow. Año: 1994. País: Estados Unidos. Género: Acción, Fantasía. Director: Alex Proyas. Guionistas: David Schow y John Shirley (adaptando el cómic de James O’Barr). Intérpretes: Brandon Lee, Ernie Hudson, Bai Ling, Michael Wincott, David Patrick Kelly, Rochelle David, Angel David, Sofia Shinas.

Puede resultar paradójico, pero esta producción ha terminado teniendo más repercusión por la prematura y sorpresiva (los más paranoicos añadirían misteriosa) muerte de su protagonista (Brandon Lee, hijo del mitiquérrimo Bruce Lee) que por sus (limitadas) cualidades cinematográficas. El cuervo es la versión fílmica de una serie de cómics en los que Erin Draven (aquí Brandon Lee) regresa de la muerte para vengar no sólo su asesinato, sino el de su amada (Sofia Shinas).

Alex Proyas (Dark City) recrea con desiguales resultados una ciudad fría, en la que siempre llueve, para recrear la maldad humana; la desolación. Por desgracia, sólo lo consigue a medias. Las localizaciones y decorados, por ejemplo, resultan tan fríos y góticos como artificiales. Sin embargo, es de justicia reconocer cierto talento en la dirección de Proyas, quien filma varios planos de lo más interesantes. Véase, por ejemplo, el reencuentro entre el protagonista y Sarah (Rochelle Davis), con la cámara girando hasta detenerse en la sombra de Erin y volviendo a girar hasta parar (esta vez sí) en el actor.

El guión, por su parte, sufre una clara falta de entidad que intenta suplir dotando de frases rimbombantes a sus personajes, haciendo, en la mayoría de los casos, que éstos (los personajes, claro) suenen más ridículos que eficaces. Poco pueden hacer los actores con unos personajes tan limitados y unos diálogos tan poco estimulantes. Incluido el mismísimo Lee (en la que se preveía sería la película de su lanzamiento), cuya interpretación (o lo que quedó de ella; no debió ser nada fácil terminar la película tras su fallecimiento, pero lo hicieron sin que “apenas se notase” a ojos del espectador) es simplemente correcta a pesar de estar muy por encima de la de sus compañeros de reparto. Mención especial merecen ciertos errores de racord u otros tan curiosos como cuando Myca (Bai Ling, Wild Wild West) sale de la ducha completamente maquillada (¡ja!). Dicho lo cual, El cuervo me parece una película cercana a la Serie B (en este caso para mal). Y eso se nota no sólo en su acabado final, el cual, dicho sea de paso, me resulta tan curioso como (a todas luces) insatisfactorio. Nota: dio pie a varias secuelas, y hasta a una serie de televisión (con Mark Dacascos, Kickboxer 5, de protagonista), de escasísima calidad y trascendencia (por mucho que en una participase Kirsten Dunst y en otra Edward Furlong).

Lo mejor: Haber arrastrado toda una legión de fans.

Lo peor: Sus cualidades fílmicas. Muy por debajo de las que uno (al menos servidor) podría esperar.

Puntuación: 5/10.