Título
original: The Kids Are All Right. Año:
2010. País: Estados Unidos. Género:
Comedia, Drama. Directora:
Lisa Cholodenko. Guionistas: Lisa
Cholodenko y Stuart Blumberg. Intérpretes:
Annette Bening, Julianne Moore, Mark Ruffalo, Mia Wasikowska, Josh
Hutcherson, Yaya DaCosta, Eddie Hassell, Rebecca Lawrence, Kunal
Sharma, Zosia Mamet.
Los chicos están bien
ha sido la sorpresa indie de la temporada; una película que, tal y
como sucediese con Juno
o Pequeña
Miss Sunshine (Little Miss Sunshine), acumuló
nominaciones (cuatro, por ejemplo, a los Oscar: película, guión
original, actriz protagonista, para Bening, y actor de reparto, para
Ruffalo) y premios (el Teddy a mejor película en el Festival de
Berlín) compitiendo con producciones mucho más publicitadas y/o
mayoritarias. Parece que su discurso tradicional (la familia unida
jamás será vencida) unido a cierto tono progresista (por muy
contradictorio que suene; y es que en esta Los chicos están bien
la familia protagonista no es la puramente “convencional”) gustó
casi por igual a público (costó unos 4 millones de dólares y
recaudó casi 35 a nivel mundial) y crítica.
Lisa Cholodenko,
quien ya había reconvertido a Ally Sheedy, miembro por derecho
propio del brat pack, en icono lésbico, gracias a la película
High Art, mezcla con acierto drama y comedia para narrarnos
cómo la rutina de una pareja, Nic (Annette Benning) y Jules
(Julianne Moore), y sus dos hijos, Joni (Mia Wasikowska) y Laser
(Josh Hutcherson), se trastoca ante la presencia de Paul (Mark
Ruffalo, en un papel que a punto estuvo de interpretar Ewan
McGregor), el padre biológico de los chicos. Y sí, como pueden
comprobar, el reparto es fantástico; es fantástico y están
fantásticos.
Sorprende la estimulante naturalidad con que
Cholodenko introduce el tema de la homosexualidad en la película. Es
más, se podría decir que su largometraje exuda un mensaje de lo más
conservador de no ser porque el arquetipo de familia que nos muestra
está compuesto por una pareja del mismo sexo. Eso sí, también hay
hueco para tocar temas un poco más “controvertidos” (¿o sería
mejor decir “contro-divertidos”?), como el hecho de que los
personajes de Benning y Moore se pongan a tono viendo… ¡porno gay
de sexo entre hombres! Los chicos están bien es, en
definitiva, una cinta de lo más agradable, bien dirigida y mejor
interpretada (a destacar el carisma de Ruffalo, aunque lo justo sería
indicar que, y ya sé que me repito, todo el reparto está
acertadísimo). Muy recomendable.
Lo mejor:
El tono de la película y la calidad de los intérpretes.
Lo peor: Los
chicos están bien no
deja de ser un drama familiar de enredo en clave de comedia y con una
banda sonora excepcional repleta de temazos (suenan canciones de
David Bowie, Vampire Weekend, Tame Impala o MGMT).
Puntuación: 7/10.
No hay comentarios:
Publicar un comentario