viernes, 22 de diciembre de 2017

Beowulf

Título original: Beowulf. Año: 2007. País: Estados Unidos. Género: Acción, Aventuras, Fantasía, Animación. Director: Robert Zemeckis. Guionistas: Roger Avary y Neil Gaiman. Intérpretes: Ray Winstone, Angelina Jolie, Anthony Hopkins, Robin Wright, John Malkovich, Brendan Gleeson, Crispin Glover, Alison Lohman, Costas Mandylor, Charlotte Salt.

Adaptación de un poema anónimo, e incompleto (parte de la obra se perdió durante un incendio), Beowulf es un melodrama que mezcla fantasía épica de espada y brujería con romance (la trama no puede ser más culebronesca) y venganza. También es la excusa para que Zemeckis (Forrest Gump) lo intente nuevamente con otra cinta de animación experimental al estilo de su fallida (las críticas fueron, en general, positivas pero no entusiastas y no obtuvo el respaldo esperado en taquilla; no ayudó que su presupuesto se disparará hasta los 165 millones de dólares, 15 más que la que nos ocupa, pero ésa es otra historia) Polar Express, es decir, aplicando una técnica denominada “captura de movimiento”, la misma que ha servido para dar vida al Hulk de Los Vengadores (The Avengers) o a Gollum en las películas de El señor de los anillos (The Lord of the Rings) y cuya función principal consiste en convertir en animación 3D lo grabado de manera convencional. De ahí que los personajes que desfilan por pantalla tengan los rasgos de los actores (el casting de Beowulf es de primer nivel, dicho sea de paso) que les han dado vida previamente.


Dos son los puntos más llamativos de la película: el trabajo de animación y su impresionante plantel de actores. El primero es el que más nos chocará desde el principio; es llamativo y resultón, pero también peca de tosco (las expresiones de los personajes se tornan huecas y el resultado final se asemeja más al de un videojuego que al de cualquier otra película de animación) y, para colmo, ha envejecido ciertamente mal. ¿Qué decir del segundo? Pues que incluye a intérpretes como Ray Winstone (rejuveneciendo para la ocasión; es decir, para interpretar al héroe que da nombre a la cinta, un poderoso guerrero que tendrá que lidiar con distintos seres del inframundo), Angelina Jolie (dando vida, y cuerpo, a un bello monstruo marino), Robin Wright Penn (el gran amor de Tom Hanks en la ya mencionada Forrest Gump), John Malkovich, nominado al Oscar por En un lugar del corazón (Places in the Heart) y En la línea de fuego (In the Line of Fire), Anthony Hopkins (para servidor siempre será Hannibal el caníbal), Crispin Glover, quien ya había trabajado a las órdenes del director (¡12 años antes!) en Regreso al futuro (Back to the Future), Alison Lohman (Big Fish), Brendan Gleeson (Braveheart, Gangs of New York, varias de las entregas de la franquicia Harry Potter) o Costas Mandylor (Saw III, Saw IV, Saw V, Saw VI, Saw VII).


El resultado final es tan curioso como fallido; en parte por las mejoras que (evidentemente) necesita(ba) la técnica de animación empleada, pero también por una historia (repleta de violencia y líos amorosos) destinada a encandilar únicamente a los fans más acérrimos de la fantasía heroica de capa y espada. Casi podría decirse que carece de un público potencial (más allá del descrito) al que dirigirse. Está claro que no es una producción para todos los públicos; ni por la historia que narra ni, desde luego, por su estilo visual. A Zemeckis se le puede reprochar que no haya querido (o podido, quién sabe) ir (mucho) más allá (de Polar Express) y se haya conformado con, “simplemente”, cambiar de género. Aunque tampoco hay que negarle, vamos a ser justos, cierta fijación por innovar dentro del (siempre competitivo) campo de la animación.

Lo mejor: Es un experimento de lo más curioso. Resulta (a pesar de sus muchos defectos en dicho apartado) llamativa a nivel visual.

Lo peor: Una animación incapaz de insuflar vida a sus actores/personajes. Carece de un público potencial al que dirigirse.

Puntuación: 5,5/10.

No hay comentarios:

Publicar un comentario