Vaya par de polis

Título original: Cop Out. Año: 2010. País: Estados Unidos. Género: Comedia. Director: Kevin Smith. Guionistas: Robb y Marc Cullen. Intérpretes: Bruce Willis, Tracy Morgan, Michelle Trachtenberg, Seann William Scott, Jason Lee, Adam Brody, Kevin Pollak, Ana de la Reguera, Guillermo Díaz, Rashida Jones, Mark Consuelos, Fred Armisen.

A Smith le suelen acusar de no ser buen director. Yo no estoy de acuerdo. Sí creo, como la gran mayoría, que es mejor guionista que director. A maravillas como Clerks, Mallrats, Persiguiendo a Amy (Chasing Amy) o Dogma me remito. Por eso no comprendo qué le empujó a aceptar dirigir esta película cuyo libreto (un homenaje tontorrón a las buddy movies de los 80) no estaba escrito por él. Y más cuando tampoco es que estuviese escrito con demasiada gracia o tino.

Bruce Willis y Tracy Morgan conforman el tándem protagonista de esta cinta. Willis se encarga de la parte más o menos seria y Morgan, popular gracias a la serie Rockefeller Plaza (30 Rock), pone (o al menos lo intenta, porque el actor, una especie de versión 2.0 de Eddie Murphy, acaba resultando terriblemente cargante) el contrapunto cómico. Ambos interpreta a un par de policías que tratan de recuperar un valiosísimo cromo que le han robado a uno de ellos (al personaje de Willis) y que necesita para poder costear la boda de su hija, interpretada por Michelle Trachtenberg, actriz a la que hemos podido ver en series como Buffy, cazavampiros (Buffy the Vampire Slayer) o Gossip Girl. Jason Lee (actor fetiche de Smith), Seann William Scott (American Pie), Adam Brody (The O.C.) y Guillermo Díaz (Nowhere) completan el reparto.

A la ineptitud de Morgan (lo más irritante de la película, sin lugar a dudas) se suma un Willis algo perdido (y eso que la comedia de acción es un subgénero en el que siempre se ha desenvuelto con soltura; nota: Smith reconocería, años más tarde, que trabajar en esta película, y, por encima de todo, tener que lidiar con Willis, acabaría convirtiéndose en su peor experiencia en un set de rodaje), un guión bastante chusco (no da nada de juego y se limita a exprimir la no demasiado convincente química entre su pareja protagonista) y una banda sonora tan ochentera como asombrosamente rallante. Me da mucha pena afirmarlo, pero Vaya par de polis (¡con lo que molaba el título pensado inicialmente y que autocensuraron sus productores: A Couple of Dicks!) es, a día de hoy y con diferencia, la peor película dirigida por Smith.

Lo mejor: Cuando nuestros protagonistas entran en una vivienda que está siendo asaltada y la dueña de la misma (Susie Essman) también se presenta, armada y dispuesta a defender lo suyo (sic).

Lo peor: Que no se vea la huella de Smith por ningún lado, el insufrible Tracy Morgan y sí, claro, su guión.

Puntuación: 3,5/10.